ALICANTE. El estado de salud del tejido productivo de la ciudad de Alicante no solo se justifica a partir de la contribución de las micropymes, pymes y profesionales autónomos vinculados en gran parte a la prestación de servicios y a la actividad turística. Ese dinamismo se evidencia también en la presencia de las grandes empresas distribuidas en el casco urbano y en las diez áreas industriales del término municipal, como refleja la evolución experimentada desde 2015 en el importe de la recaudación del Impuesto de Actividades Económicas (IAE) en la cuota que le corresponde ingresar al Ayuntamiento de Alicante: un coeficiente que varía en una horquilla que va del 2,30% al 0,72%, en función de la categoría de la calle en la que esté ubicada la empresa en cuestión.
En concreto, en esos últimos nueve años, las empresas con una facturación anual superior al millón de euros asentadas en la ciudad -las que están obligadas a abonar el IAE- han incrementado el importe de los ingresos fiscales municipales por ese tributo en un 20,91%, en la medida en que la recaudación municipal ha pasado de los 7,6 millones de 2015 a los 9,2 correspondientes al último ejercicio económico completo (2024).
El balance alienta al optimismo en la medida en que, además, se habría registrado un crecimiento en forma de sierra en el que se habría conseguido superar altibajos como los deparados en los años 2017, 2019 y 2023, incluidos los efectos generados por la pandemia, el conflicto de Ucrania y la crisis inflacionista, además de otros factores que también influyen de modo colateral en la facturación empresarial, como la celebración de elecciones. Esos baches se habrían remontado para alcanzar la cifra más alta de recaudación de la década en 2024, según los balances de ingresos contabilizados por la Concejalía de Hacienda. Así, el mayor incremento interanual de la recaudación se produjo en 2016, con un crecimiento del 9,36% respecto al año precedente. A ese pico le siguió una caída del 2,97% un año después, en el que el Ayuntamiento pasó a ingresar 8,1 millones frente a los 8,3 obtenidos en 2016.
Las estadísticas mejoraron en 2018 con otro incremento del 6,82%. No obstante, 2019 se completó con otro retroceso aún más significativo, del 5,84%, desde los 8,6 a los 8,1 millones en el que pasa por ser el descenso más abultado de los últimos nueve años hasta ahora. Solo se acerca el dato de 2023, cuando también se registró una disminución del 4,24% en el importe tributado. Con todo, 2024 permitió superar esas cifras con otro incremento del 7,06% hasta los citados 9,6 millones en lo que representa la segunda mayor crecida de la serie analizada, según los mismos datos.

- La evolución de los ingresos por IAE en Alicante. -
Esa evolución en los ingresos fiscales generados por las principales compañías asentadas en Alicante se produce en cinco de los nueve años estudiados, con crecimientos superiores a los registrados en términos de crecimiento del PIB nacional, como refleja la tabla adjunta. El comportamiento del IAE recaudado por el Ayuntamiento solo fue desfavorable respecto al PIB estatal en 2017, 2019, 2022 y 2023, lo que daría cuenta de la solidez de las empresas afincadas en la ciudad en relación con el escenario económico nacional.
Bonificaciones
En cualquier caso, el objetivo municipal continúa siendo el de captar la instalación de más empresas de tamaño medio y de gran tamaño vinculadas con la producción de bienes o con la prestación de servicios (el área logística, por ejemplo) con el propósito de generar nuevas oportunidades de empleo y de huir de un exceso de exposición a las actividades ligadas al sector turístico. Así, desde el año 2021, se mantiene un sistema de bonificaciones especiales en el cobro de la cuota municipal del IAE por el que se extienden las exenciones establecidas en el ámbito estatal para los dos primeros años de funcionamiento de la empresa. Así, la ordenanza fiscal municipal incluye una bonificación del 50% en el tercer año de actividad, que se convierte en un 25% en el cuarto y quinto.
Al tiempo, se incluye una bonificación de hasta el 95% de la cuota íntegra del impuesto a favor de las actividades económicas que sean declaradas de especial interés o utilidad municipal por concurrir circunstancias sociales, culturales, histórico artísticas o de fomento del empleo que justifiquen tal declaración por parte del pleno de la corporación. Para el caso de actividades económicas desarrolladas por empresas de nueva implantación en el término municipal de Alicante, también se establecen reducciones especiales, del 40% en el primer año, 30% en el segundo y 20% en el tercero. Eso sí, esa ventaja queda mejorada en los supuestos en los que la implantación de esas nuevas empresas se produzca en suelos vacantes, lo que conllevará una bonificación del 50% durante los tres primeros años de actividad.
Y, por último, también se incluye un premio fiscal en forma de reducción de la tributación para aquellas empresas que promuevan un incremento de plazas en sus plantillas. Esa bonificación es directamente proporcional al incremento en la contratación indefinida, de modo que las empresas que aumenten su relación de trabajadoers en hasta un 5%, optarán a una bonificación del 3%. Cuando el aumento de los contratos sea de entre el 5 y el 10%, el descuento será del 7%. Con crecimientos de plantilla del 10% y hasta el 14%, la bonificación será del 15%. En los casos en los que se gane entre el 14% y hasta el 60% en empleados en plantilla, el descuento será del 30%. Y, por último, con incrementos de más del 60%, la bonificación será del 45%.