SAN VICENTE DEL RASPEIG. San Vicente pretende dar un lavado de cara a diversas calles del municipio. La Junta de Gobierno Local ha aprobado dos licitaciones en este sentido: las obras de reurbanización de la calle Jazmines y Paseo de los Olivos en la urbanización Haygón (un millón de euros) y los trabajos de acondicionamiento de la calle Villafranqueza y su entorno (3,5 millones de euros). El total de ambas actuaciones suma más de 4,5 millones de euros (4.569.196 euros).

Urbanización Haygón

Por partes. Las obras en la urbanización Haygón ascienden a 1.069.419 euros (IVA incluido) y el plazo de ejecución será de nueve meses desde su adjudicación. El ámbito de actuación comprende una zona entre las calles Río Turia, Cottolengo, calle del Sagrat y avenida de Haygón, más en concreto, la reurbanización de las calles Paseo de los Lirios, Paseo de los Jazmines, parte de la calle paseo de los Olivos y paseo de los Geranios.

Los trabajos pretenden mejorar la escena urbana, ampliando zonas peatonales para permitir un mayor uso y disfrute del entorno; mejorar la accesibilidad, y acondicionar, reurbanizar y mejorar las redes de servicios urbanos. Y es que, en la actualidad, hay aceras peatonales que no cumplen con la normativa de accesibilidad, zonas de aparcamiento estrechas en la calzada, redes de servicios antiguas y pavimentos en mal estado de conservación en algunas de las calles.

La redacción del proyecto se encargó a la empresa Consultores Asociados Ingeniería y Urbanismo S.L.P, quien comprobó y expuso el deterioro general de los pavimentos y otros elementos urbanos, así como la falta de uniformidad de los mismos en las calles sobre las que se va a actuar. Con el proyecto se pretende homogeneizar las vías urbanas.

El documento técnico también indica la necesidad de renovación de las infraestructuras, así como implementación de la accesibilidad que actualmente es nula en la mayoría de las calles del ámbito analizado. Y se han detectado problemas de funcionamiento en la infraestructura subterránea, principalmente en la red de saneamiento instalada en la calle Paseo de los Lirios.

Calle Villafranqueza

En cuanto a las obras de la calle Villafranqueza, suman 3.499.777 euros (IVA incluido) y deberán ejecutarse en un plazo de ocho meses. Aunque en los últimos años se han realizado varias intervenciones urbanas para mejorar el estado del vial, los análisis recientes (recogidos en el PMUS y otros estudios complementarios) subrayan la necesidad de acometer un proyecto más ambicioso e integral que permita actualizar su configuración urbana y transformarla hacia un modelo más peatonal y sostenible.

El Ayuntamiento encargó la redacción del proyecto a los ingenieros de Caminos, Canales y Puertos José Ramón García Pastor y Catalina García Pastor. En el documento se fija que el objetivo principal de la intervención es reordenar el espacio público para consolidar un eje que conecte de manera efectiva el Hort Lo Torrent con el núcleo histórico central de San Vicente.

Los trabajos abarcan el tramo de la calle Villafranqueza comprendido entre la calle Alicante y el Hort Lo Torrent, con una extensión aproximada de 550 metros lineales. Asimismo, la intervención considera, en función de su estado actual, la mejora de espacios conexos como las calles Benlluire, Pelayo, Valencia, Zorrilla, San Juan, y la intersección en la rotonda de la Donna Lluna, garantizando una coherencia global en toda la propuesta.  

Además, se pretende modernizar la urbanización, incorporando nuevos pavimentos, infraestructuras renovadas y optimizando los servicios urbanos; potenciar la eficiencia energética, a través de la mejora del alumbrado público mediante la implementación de sistemas energéticamente eficientes y sostenibles, e intervenir sobre el ajardinamiento y paisajismo, revisando y mejorando las zonas verdes para potenciar la calidad ambiental y estética del espacio.

También se actuará sobre la accesibilidad y movilidad, para que se cumpla la normativa de accesibilidad universal, así como la implementación de medidas de calmado de tráfico, especialmente en las zonas residenciales; drenaje y gestión de escorrentías, con especial atención a la resolución de problemas asociados al drenaje y la gestión de aguas superficiales, poniendo atención en los tramos donde se proyecte una plataforma única, y se utilizarán materiales de calidad, acordes a las especificaciones municipales y que estén adaptados a las condiciones particulares de la zona.