ALICANTE. El planteamiento barajado por el Ayuntamiento de Alicante para tratar de situar un proyecto de centro de congresos en terrenos del Puerto de Alicante comienza a cobrar forma con la participación de la Diputación. Cuando menos, el alcalde de Alicante, Luis Barcala, y el presidente de la institución provincial, Carlos Mazón, han registrado este viernes un escrito ante la Autoridad Portuaria de Alicante en el que las dos administraciones manifiestan su interés por desarrollar la construcción de dicha infraestructura turística, además de un edificio anexo que acogería las oficinas centrales de Suma (el organismo tributario de la Diputación) en instalaciones del recinto portuario.
En concreto, en virtud de ese escrito, las dos administraciones consideran que el emplazamiento idóneo para situar esos dos nuevos inmuebles de uso público sería la explanada de suelo comprendida entre el muelle 9 y parte del muelle 7, a espaldas de la ubicación prevista para la construcción del nuevo edificio del Distrito Digital, en el muelle 5. En este momento, dicho espacio se utiliza para la descarga de mercancías paletizadas. Y, además, alberga las instalaciones de la Guardia Civil en el Puerto.
La propuesta de Ayuntamiento y Diputación abarcaría una superficie global de 16.000 metros cuadrados, según fuentes consultadas. De ellos, 5.500 metros cuadrados se destinarían a la construcción del centro de congresos y otros 2.000 al centro de operaciones de Suma, en función del primer avance de estudio técnico encomendado a un especialista ligado a la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), como ya ha informado Alicante Plaza.
Así, a través del escrito, se anuncia ante la Autoridad Portuaria la voluntad de ambas administraciones de solicitar la correspondiente concesión administrativa para posibilitar la construcción de esos dos edificios en el momento en el que el Plan Especial del Puerto lo permita. De hecho, a través de ese mismo escrito, se demanda a la Autoridad Portuaria que inicie en el menor plazo posible las modificaciones que resulten necesarias en su planificación urbanística interna (la Delimitación de los Espacios y Usos Portuarios) con el fin de permitir el encaje de los dos edificios.
Por último, se plantea que, para impulsar la construcción, se prevé la constitución de un consorcio entre administraciones, y se avanza la futura formalización de un protocolo de intenciones entre todas las partes implicadas para que pueda desarrollarse la construcción de los dos equipamientos.
En principio, según fuentes consultadas por este diario, la propuesta de desarrollo de esos dos nuevos edificios ya habría sido compartida con la Autoridad Portuaria, al menos desde finales de 2020. En ese sentido, al menos ya se tendría constancia desde entonces de esa manifestación de interés. Con todo, para el desarrollo de la iniciativa todavía debería cubrirse toda la tramitación administrativa previa apuntada en el escrito registrado por el Ayuntamiento y la Diputación este viernes.
A partir de ahora, Ayuntamiento y Diputación deberían concretar la redacción de los pliegos para licitar el diseño de los proyectos de ambos edificios. Esa labor se desarrollará a partir del informe técnico ya encargado al especialista ligado a la UPV, en el que se confirma que el espacio previsto sí tendría la capacidad necesaria para acoger los dos edificios, después de efectuar modificaciones respecto al planteamiento inicial.
En principio, se prevé que la construcción del edifico pueda suponer un coste próximo a los 50 millones de euros, que quedaría sufragado por la Diputación en dos tercios, mientras que el Ayuntamiento aportaría el tercio restante. En cualquier caso, todo quedaría abierto a la posibilidad de que pudiese sumarse a la Generalitat en la financiación de las obras.