El edificio del MACA junto a la Plaza de Santa María de Alicante.ALICANTE. De la planificación a la licitación. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, el bipartito compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), pone en marcha el proceso para ejecutar la ampliación del Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA) con el fin de potenciarlo como espacio museístico de referencia en su ámbito. Salvo modificación de última hora, la convocatoria del concurso para encargar la redacción del proyecto quedará aprobada el próximo martes en Junta Local, con un presupuesto de 399.990 euros, con lo que se daría impulso a la actuación comprometida tras el acicate definitivo que habría supuesto la donación de la colección Jenkins y Romero. El compendio de 291 creaciones de 155 artistas internacionales que la conforman habría forzado a acelerar la expansión para disponer de salas adicionales en las que mostrar sus piezas.
Así, el propósito es conseguir que sus instalaciones puedan crecer en otros 2.500 metros cuadrados sobre la parcela libre situada justo en la trasera del inmueble, en la calle Balseta, hoy utilizada como aparcamiento provisional. De este modo, se ganaría un tercio de capacidad más respecto a su superficie actual, de 4.600 metros, para exponer obra plástica, pintura y fotografía y, además, escultura de gran tamaño. De hecho, una de las especificaciones principales del anteproyecto con el que trabaja la Concejalía de Cultura aspira a conseguir la creación de "alguna nueva sala monumental en cuanto a altura, con lo que aportaríamos al inmueble espacio de grandes proporciones, ideales para albergar esculturas imponentes", según ha venido explicando hasta ahora el titular del departamento, Antonio Manresa (Cs).
Al tiempo, se prevé aprovechar la ejecución de ese proyecto para dotar a la pinacoteca de un segundo acceso, a través de un corredor subterráneo que discurriría bajo la Plaza de Santa María, en función de los bocetos trazados hasta el momento, siempre que resulte compatible con los estudios geológicos y arqueológicos sobre ese emplazamiento.
¿Cuándo podría ponerse en marcha la fase de obras? El bipartito confiaba en la posibilidad de disponer de ese nuevo espacio adicional operativo antes de que finalizase el mandato, en la primavera de 2023.
Los bocetos del anteproyecto.No obstante, los plazos requeridos para formalizar la contratación del proyecto y la de su ejecución posterior auguran que el inicio de la intervención se retrasará al menos hasta finales de este año. Tanto el momento de su finalización como su coste dependerá de las condiciones definitivas del proyecto, aunque, en principio, se baraja que pueda requerirse un mínimo de un año de obra y que no existan problemas presupuestarios para llevarla a cabo, ya que se contaría con el remanente de crédito (dinero consignado pero no gastado) que se ha venido arrastrando durante los dos últimos años, después de haber saldado el 100% de los préstamos bancarios y de haber ejecutado inversiones en distintas mejoras urbanísticas.
Con la licitación de la redacción de proyecto, el bipartito estaría en condiciones de activar dos de sus principales iniciativas en el ámbito de la cultura, a la espera de que el Sabadell responda al requerimiento municipal y confirme por escrito su compromiso de cofinanciación para acometer la reforma del Teatro Principal, con la que se pretende agotar los tres millones aportados por la Generalitat en el momento en el que se incorporó a la comunidad de propietarios de la sala tras la adquisición de un tercio de sus participaciones.
