Los alcaldes de Elche y Alicante, Pablo Ruz y Luis Barcala, en la presentación de la primera maratón entre las dos ciudades.ALICANTE. Alicante y Elche ponen en marcha la celebración de su primera maratón conjunta, anunciada en la última edición de Fitur, en enero de este año, con la pretensión de que la prueba deportiva sirva como plataforma de proyección internacional de las posibilidades que ofrece la unión de dos "ciudades hermanas" como espacio de oportunidades empresariales y de disfrute para el ocio como destinos turísticos. Así lo han defendido este viernes sus dos alcaldes, Luis Barcala y Pablo Ruz, tras presentar la convocatoria de la carrera como primer ejemplo de la "nueva etapa" de colaboración y cooperación iniciada este mandato, para potenciar las posibilidades del área funcional que constituyen ambas poblaciones.
A ese primera experiencia de trabajo en común, le seguirán otras iniciativas ya anticipadas en las reuniones de coordinación desarrolladas hasta ahora, como la celebración de actividades culturales conjuntas en las que se dé a conocer el patrimonio de las dos ciudades, o la puesta en marcha de un bono de transporte compartido en el que siguen trabajando los técnicos de las dos ciudades, según han recalcado los dos primeros ediles. Por el momento, se trata de un trabajo en el que se está priorizando la redacción del plan estratégico conjunto anunciado este verano.
En todo caso, tanto Ruz como Barcala han destacado el valor de la maratón como primer engranaje de esa etapa de entendimiento entre las dos ciudades. Así, han detallado que la prueba tendrá lugar el 30 de noviembre de 2025 con un recorrido que partirá desde el núcleo histórico de Elche, en el entorno del Palacio de Altamira y de la Basílica de Santa María, y que concluirá en el muelle 12 del Puerto de Alicante, tras completar un recorrido de 42 kilómetros ya homologado por la Federación Española de Atletismo tanto en su distancia como en su itinerario. Ese trayecto discurrirá en 11 kilómetros por las calles de Elche y en otros 11 en las calles Alicante, además de otros 20 kilómetros entre las dos ciudades, en las que se atravesará el parque empresarial de Torrellano, IFA y la zona industrial de Aguamarga hasta la llegada a Alicante por la avenida de Elche y Casa Mediterráneo.
El reto es conseguir que la maratón "se consolide en el calendario internacional" en próximas ediciones para que pueda convertirse en un elemento de atracción de corredores extranjeros, que puedan desplazarse hasta las dos ciudades y permanecer en ellas en torno a una semana, según ha explicado el director de la maratón, José Manuel Albentosa. De hecho, se ha contactado con dos plataformas especializadas para promocionar la difusión de la prueba tanto en Noruega como en Suecia y en Estados Unidos.
En principio, se trabaja con la previsión de que la primera edición pueda contar con la participación de entre 2.000 y 3.000 participantes, con perspectivas de que pueda crecer en lo sucesivo. "Debemos tener en cuenta que la VI edición de la Gran Carrera del Mediterráneo que celebramos este año la hemos cerrado con 3.100 inscritos", ha apuntado Albentosa. En cualquier caso, tanto Albentosa como Ruz y Barcala han incidido en que la prueba cuenta con reclamos que pueden alentar a la participación del público extranjero como el diseño de un recorrido que atravesará los principales enclaves turísticos de ambas ciudades, en los que se sitúan los elementos patrimoniales más destacados, así como el echo de disponer de una temperatura media de entre 15 y 18 grados en el mes de noviembre.
