Una oficina de las oficinas del organismo tributario de la Diputación, Suma.ALICANTE. El Ayuntamiento de Alicante volverá a dejar la gestión de sus impuestos en manos de Suma, el organismo tributario de la Diputación Provincial. Las dos administraciones ultiman las negociaciones para organizar el traspaso de las competencias que quedaron asumidas por el departamento municipal de Hacienda en los primeros compases de la etapa de gobierno del extinto tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) durante el pasado mandato.
El acuerdo conllevará el pago de cerca de un millón de euros anuales a Suma a cambio de que asuma la gestión de la recaudación, según ha confirmado el alcalde de Alicante, Luis Barcala, este viernes, en una comparecencia pública. No obstante, ha argumentado que ese coste queda amortizado si se tiene en cuenta la previsible mejora en los porcentajes de recaudación (que no ha llegado a cuantificar, aunque ha dicho que los ingresos no aumentarán de manera significativa puesto que ya se alcanzan altos porcentajes desde la gestión municipal) y otras ventajas añadidas como la mejora de la atención al público a través de la red de oficinas de Suma. Máxime, si se tiene en cuenta que Suma maneja la previsión de abrir una nueva oficina en el distrito de Playa de San Juan.
Además, ha señalado que con el traspaso de la gestión de los impuestos a Suma también se ampliarán las facilidades de los ciudadanos para pagar impuestos, en la medida en que el organismo tributario de la Diputación ofrece mayores flexibilidades para fraccionar el pago de los impuestos a las que, según ha incidido, sí se están acogiendo los ciudadanos de otros municipios de la provincia, pero no los de Alicante. De este modo, según ha argumentado, se pondrían al alcance de los ciudadanos posibilidades de pago "blando" que pueden contribuir a aliviar la carga fiscal en un contexto de crisis y de recesión.
En todo caso, el primer edil ha asegurado que la pretensión del Ayuntamiento es que se mantenga el mismo calendario de pago de los tributos locales que existe en la actualidad, de modo que sea Suma la que adapte la recaudación en Alicante y no a la inversa.
El alcalde de Alicante, Luis Barcala.La medida "está inspirada en la búsqueda de la mejora de la eficacia en la gestión, pero sobre todo en la mejora de la atención al ciudadano", ha expuesto. Así, ha considerado que el traspaso de la gestión impositiva a Suma permitirá "acercar" la información a los ciudadanos al ampliar los puntos de atención, en sintonía con otras iniciativas como la creación de las oficinas del SAIC o de la red de ciberquioscos municipales.
"No quiero que los ciudadanos tengan que hacer colas; trabajar con Suma, que es lo que hacen todos los ayuntamientos de la provincia de todos los colores políticos, va a multiplicar las oficinas de atención, ampliar la atención presencial, y multiplicar el fraccionamiento y la comodidad para el pago", ha explicado. "Nosotros no podemos fraccionar el pago de un impuesto más allá del periodo voluntario, pero Suma sí puede hacerlo, y esa es la gran ventaja competitiva que están teniendo en otras ciudades, cuyos ciudadanos sí pueden recurrir a otras fórmulas de pago blando, de pago cómodo que nosotros no podríamos aplicar", ha enfatizado.
"No queremos que el pago de impuestos se convierta en un problema para los ciudadanos porque eso al final repercute en la propia recaudación, así que ese es el objetivo: multiplicar los medios y las facilidades y buscar la eficiencia", ha añadido. Además, ha destacado que la medida permitirá liberar a técnicos municipales "de una alta cualificación" para el desempeño de otras funciones ligadas a la Concejalía de Hacienda y el área de Intervención.
Por último, ha señalado que las facilidades de pago que procura el sistema de Suma permite mejorar los porcentajes de recaudación, por lo que existen "perspectivas de mejora en los ingresos" y ha enfatizado en el ahorro de costes que supone el hecho de suponer de una red de oficinas que permite ampliar la atención al público.
