ALICANTE. Ya es oficial. La plantilla del gigante alicantino del mármol Grupo Levantina ha aceptado las condiciones planteadas por la empresa en su última contraoferta, y sobre la campana ha dado un 'sí' mayoritario a la propuesta. Este miércoles, los empleados de las plantas de producción de Novelda se han sumado a sus compañeros de la cantera, que ya validaron ayer esta propuesta, y han apoyado mayoritariamente el acuerdo. En el caso de la planta 'Novelda 14', incluso por unanimidad de sus 20 trabajadores.
Según han explicado fuentes sindicales, "todas las plantas han ratificado el 'sí' a las propuestas de la empresa", y la comisión negociadora se ha encerrado a las 4 de la tarde de este miércoles con la dirección de la firma, propiedad del fondo de inversión británico Bybrook, para firmar el acuerdo y negociar entre otros aspectos las "condiciones sociales, la comisión seguimiento y la empresa de formación" para facilitar la recolocación de los afectados en otros sectores.
Como ha venido contando este diario, la última oferta de la empresa, que llegaba este lunes tras la reunión en el Tribunal de Arbitraje Laboral (TAL) de Alicante, supone rebajar la cifra de despidos en 73 personas, un 23% respecto al planteamiento inicial (307). Así, serán 234 las bajas que se produzcan durante la regulación de empleo, 87 en la cantera del Monte Coto que explota Levantina de Recursos Mineros SAU, donde trabajan 222 empleados; y 147 en las plantas de producción de Levantina y Asociados de Minerales SAU, con una plantilla de unas 800 personas.
En cuanto a las condiciones económicas, la empresa se ha avenido a elevar la indemnización hasta 27 días por año trabajado con un tope de 14 mensualidades, una cifra que mejora sustancialmente los 23 días por año trabajado con 13 mensualidades de la primera oferta. La comisión negociadora también ha logrado arrancar el pago de una sola vez cuando se firme la baja, en lugar de la primera fórmula propuesta (20 días por año con un tope de 12 en el momento del despido, y el resto en un único pago seis meses después).
La reducción de plantilla de la empresa busca por un lado rebajar los costes de explotación (el gasto de personal supuso 57 millones de euros en 2017, último año con las cuentas aprobadas) y por otro adecuar la plantilla a su nuevo plan de negocio, que pasa por reducir la producción para limitar la cantidad de mármol crema marfil en el mercado, y elevar de esta forma el precio del producto final (Levantina vende tanto bloques de piedra natural, en metros cúbicos, como piezas terminadas, en metros cuadrados).
El cambio en la demanda, que ha girado hacia los mármoles blanco y negro, dominados por las empresas italianas y que se venden a un precio mucho mayor, y la caída de la construcción en España y en los mercados extranjeros fundamentales como China y Brasil han llevado a la empresa a una espiral de pérdidas, agravada con los deterioros de activos aplicados en los dos últimos ejercicios. Levantina ya tuvo que reducir capital de 100 millones de euros a solo 60.000 a principios de año, después de acumular pérdidas de 194 millones en los dos últimos ejercicios.