VALÈNCIA. La industria valenciana le ha perdido el miedo al coronavirus. Esa es la principal conclusión que se desprende de la encuesta que Fepeval ha realizado en más de 400 empresas repartidas por todo el territorio valenciano. Esta es la segunda vez que la Federación de Polígonos Industriales pregunta sobre las perspectivas de futuro que quedan después de la crisis de la covid-19. Una respuesta que en abril de 2020 fue algo más pesimista y que en noviembre de ese mismo año mejoró considerablemente: mientras que en la primera ronda se esperaba una pérdida global de la facturación del 52%, en noviembre la cifra de amortiguó hasta el 11%.
Uno de los datos más llamativos que se desprenden de esta nueva encuesta tiene que ver con el número de empresas que piensan que la covid-19 puede suponer el fin de su negocio: en abril, la cifra se situaba en el 21% de los participantes, mientras que en noviembre nadie se planteó esta situación.
También ha sufrido una importante revuelta el número de encuestados que esperaba una reducción de la facturación para el año 2020 de entre el 75% y el 100%: mientras que en abril el 24% de los participantes se veían en esta tesitura, en noviembre la cifra bajó drásticamente hasta el 2%. Por su parte, en la segunda ronda, hasta el 19% consideró que su facturación de 2020 sería muy similar a la de 2019.
Finalmente, la casuística que más se repite en la última consulta es la de la previsión de una pérdida de la facturación para 2020 de entre el 0 y el 25%: en el mes de noviembre el 30% de los participantes auguraban este desenlace, mientras que en abril tan solo lo hicieron el 16%. Además, un 15% aseguró que esperaba cerrar al año con más beneficios que en 2019, mientras que en abril la cifra de estos optimistas se quedaba tan solo en el 3%.
Por sectores, los que más han mejorado sus previsiones con respecto a abril de 2020 han sido "actividades profesionales, científicas y técnicas", "sector primario" y "construcción". Por su parte, tal y como era de esperar, "hostelería" ha sido una de las actividades más castigadas por el impacto de la covid-19. De este modo, el sector de la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca proyectó en noviembre un crecimiento de la facturación de entre el 0 y el 30%.
Un dato que repitieron el 22% de los encuestados en el campo de la construcción y el 25% de los profesionales en información y telecomunicaciones. Además, el 25% de las empresas arraigadas en el sector científico o técnico aseguró que esperaba un crecimiento de más del 15% con respecto a la facturación de 2019.
En contraposición, el 56% de los participantes en el sector de la hostelería auguró pérdidas de entre el 25 y el 50% para el año 2020. Tampoco fueron optimistas los profesionales del sector inmobiliario: el 33% consideró que perdería entre el 25 y el 50%, y el 17% entre el 50 y el 75%. Además, nadie anticipó ganancias dentro de esta actividad.
En abril, muchas más empresas se plantearon la posibilidad de recudir sus plantillas ante las previsiones de graves pérdidas económicas como consecuencia de la crisis de la covid-19. Sin embargo, el avance del año 2020 fue suavizando esta tendencia: mientras que en la primera encuesta 17% creyó que tendría que desprenderse de entre el 25 y el 50% de sus trabajadores, en noviembre tan solo el 8% seguía pensando igual.
Por su parte, se ha reducido a la mitad el número de encuestados que considera que tendrá que despedir a una cantidad comprendida entre el 50 y el 75% de su plantilla: pasan de ser el 4% al 2%. Finalmente, también se percibe una reducción en aquellas empresas que esperan recortar su plantilla entre el 75 y el 100%: eran el 4% en abril y ahora el 3%.
La tendencia más consolidada que se desprende de la última encuesta es que la mayoría de las empresas piensan mantener su plantilla sin ningún tipo de cambio: el 52% reconoció en noviembre que no preveía hacer ningún ajuste. Por su parte, el 9% aseguró que aumentaría su número de trabajadores, en contraposición al 2% del mes de abril.
De nuevo, "información y telecomunicaciones" y "actividades profesionales científicas y técnicas" son las que más crecimiento esperan, también en número de trabajadores: en ambos sectores, el 25% de los encuestados ha dicho que espera reforzar su plantilla en más del 15%. En cuanto al mantenimiento de los trabajadores, "agricultura, ganadería, silvicultura y pesca", "construcción" y "actividades administrativas" son las que mejor resisten: más del 75% de los participantes afirmó que no haría ningún ajuste en el futuro inmediato.
Finalmente, en el global de de Fepeval, la entidad estimó en abril que se perdería un 15% de la fuerza laboral entre todas sus entidades federadas, mientras que en noviembre la cifra se redujo a menos de la mitad: un 7%.
En cuanto a las acciones que se podrían llevar a cabo para reducir el impacto de la covid-19 sobre las empresas, la inmensa mayoría de los encuestados ha considerado que una de las mejores salidas es mejorar los procesos para aumentar la productividad: hasta un 52% barajó esta como una de las mejores posibilidades para resistir al embiste de la pandemia. La transformación digital también es una de las principales preocupaciones de los participantes, con un 45% que la consideran esencial para mejorar su negocio.
Finalmente, también ocupa un puesto importante el desarrollo de nuevos productos y servicios, con un 38% de las empresas interesadas por este camino. Por el contrario, tan solo el 5% ve una solución factible el traspaso o cierre del negocio, y un 6% las desinversiones.
"Lo que sí que podemos afirmar es que la pandemia nos ha ayudado a dar un salto muy importante en cuanto a digitalización. La covid-19 nos ha hecho avanzar como mínimo seis años en esta materia, ya que hemos introducido cambios que no se esperaban hasta 2026", ha asegurado a Valencia Plaza el gerente de Fepeval, Diego Román. Además, con respecto a los resultados obtenidos en la segunda encuesta, también ha afirmado que la industria es uno de los sectores que mejor ha resistido el ataque de la crisis sanitaria. "Cuanto más porcentaje del PIB acapara la industria, más fuerte es la economía de un país", ha concluido.
Finalmente, una de las cuestiones que también se abordaban en el cuestionario era el nivel de aceptación de las Entidades de Gestión y Modernización (EGM) entre los empresarios. Unos resultados que han sido indudablemente positivos: el 61% está a favor de que se empiecen a implantar estas figuras en las áreas industriales.
Entre los servicios más valorados que ofrece esta fórmula para las empresas se encuentra la mejora de la colaboración público-privada que supone, los avances en materia de gestión de residuos y de economía circular, y el desarrollo obligatorio de los planes de emergencias. También adquieren importancia las infraestructuras de banda ancha y conexión a internet, la participación de las empresas en la gestión del área industrial o las facilidades que se ofrecen para la interlocución de los asociados con las administraciones públicas.