Foto: CORTS/INMA CABALLERVALENCIA (EFE). La consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo, ha asegurado este jueves en Les Corts que las 800 camas habilitadas en los tres nuevos hospitales de campaña serán "absolutamente determinantes para cumplir los criterios que permitan a la Comunitat pasar de fase en la desescalada".
En su comparecencia ante la Diputación Permanente para explicar su gestión durante el estado de alarma por el coronavirus, Bravo ha informado de que "de las de las 5.818 personas que trabajan en las 64 sedes judiciales valencianas, sólo se han detectado 10 casos de contagio del virus".
En relación al tiempo perdido en la Administración de Justicia, la consellera se ha mostrado convencida de que "no podemos plantear una recuperación basada únicamente en el incremento de recursos personales”, sino que habrá que “optimizar los recursos existentes e incorporar nuevas reglas de juego". Ante las acusaciones lanzadas desde Ciudadanos, la consellera ha negado que en la Comunitat se estén ocultando datos sobre las cifras de fallecidos por coronavirus; "no hemos venido a engañar a nadie, ni a ocultar información ni a aprovecharnos del sufrimiento y a embolsarnos unos cuantos euros de paso, como hacían otros, sino a proteger a la ciudadanía de la mejor forma posible, con aciertos y errores".
Sobre los hospitales de campaña -a los que se ha referido como centros modulares- ha asegurado que "entre los tres tienen una capacidad de 1.100 camas" y "no son comparables a las instalaciones provisionales de otras comunidades autónomas como Madrid, Castilla y León o Cataluña, sino ampliaciones de los hospitales de referencia de cada provincia". El coste del montaje de los tres centros modulares fue de 4,8 millones de euros, a los que hay que sumar otros 2,2 millones que costó la adecuación de los terrenos y que se encomendó a la empresa pública Tragsa.
Los hospitales están diseñados para que puedan ser desmontados y almacenados para un uso posterior en otra emergencia, ha asegurado Bravo, quien ha añadido que "su construcción nunca fue una cuestión de celeridad, sino de operatividad y de previsión para que nuestro sistema sanitario no colapsara y que, además, permanecerán montados todo el tiempo que sea necesario y en especial ante la posibilidad de nuevos rebrotes de la epidemia en el futuro inmediato".
En materia de Justicia, la consellera ha indicado que "se han instalado los sistemas necesarios para favorecer la labor no presencial de 930 funcionarios, es decir el 20 % de las plantillas". "Ni quiero ni debo edulcorar nada. Nos queda un áspero camino por recorrer", ha apuntado Bravo, quien en el turno de réplica ha añadido que "si esta situación se hubiese producido en 2015 hubiese sido imposible siquiera prestar los servicios mínimos en los juzgados".
El diputado del PP José Císcar ha asegurado que "la comparación -de los hospitales de campaña- con IFEMA es inevitable. El de Madrid estuvo listo en tres días y ha tenido más de 4.000 pacientes, mientras que todavía no sabemos cuál será la función de los de aquí". Asimismo, ha parafraseado a Hamlet al afirmar que "algo huele a podrido en Dinamarca", en referencia a la adjudicación por 9 millones de los hospitales de campaña a una empresa constituida en febrero con un capital social de 3.000 euros.
A esta afirmación, Bravo ha respondido que "donde huele mal es en Haití" -en alusión a la malversación de fondos destinados a Cooperación en la anterior etapa del PP-, y ha explicado que la empresa en cuestión es fruto de la fusión de dos "con amplia experiencia como proveedoras de Defensa” y ha subrayado que “sólo la limpieza de IFEMA ha costado más que cualquiera de los tres hospitales de campaña valencianos".
Vicente Fernández, diputado de Ciudadanos, ha cuestionado los datos oficiales de fallecidos en la Comunitat, ha criticado el gasto en hospitales de campaña y ha reprochado a Bravo que "antepusiese su ideología de género -incentivando el 8M- a la salud de los valencianos".
El portavoz de Vox José María Llanos ha vuelto a reclamar que la Comunitat declare el luto oficial y que À Punt luzca un crespón negro y ha criticado el "enorme gasto" que han supuesto los hospitales de campaña en comparación con el habilitado en IFEMA.
Los grupos que sustentan el Gobierno del Botànic ha destacado los beneficios de los hospitales de campaña para "mantenernos lejos del colapso sanitario" o ante "posibles rebrotes" y los han considerado una opción "más lógica que la Feria de Muestras".
