Las sillas de oficina de la alicantina Actiu se abren hueco en el complejo de La Moncloa

ALICANTE. La empresa alicantina de muebles de oficina Actiu, fundada hace medio siglo por Vicente Berbegal en Castalla, viene creciendo a un ritmo vertiginoso en los últimos años. Su facturación crece dos dígitos de un año para otro, está presente en 65 ciudades de todo el mundo con sus showrooms y acaba de meterse en el programa de aceleración de exportaciones Cre100do del ICEX. Ya amuebla incluso aeropuertos internacionales y sedes del Instituto Cervantes, como ha contado Alicante Plaza. Y sus sillas de oficina se acaban de colar hasta en La Moncloa.

La Oficina Presupuestaria y de Gestión Económica del Gobierno, que depende directamente de la vicepresidenta del Ejecutivo central, Soraya Sáenz de Santamaría, acaba de encargar a la empresa de Berbegal el suministro de sus cada vez más conocidos muebles de oficina para amueblar los despachos de este organismo del Gobierno, que ocupa un edificio en el complejo de La Moncloa, cerca del palacio donde tiene su residencia el presidente Mariano Rajoy y donde se reúne cada viernes el Consejo de Ministros.

Según se ha publicado en la Plataforma de Contratación del Sector Público, el contrato consiste en "suministro de mobiliario mediante contrato menor", y se ha firmado por un importe de 17.060,09 euros, impuestos incluidos (en realidad, el Gobierno pagará a Actiu unos 14.099,25 euros, dado que el IVA lo soporta directamente el Ejecutivo al tratarse de una administración pública). La fórmula del contrato menor ha permitido a la Oficina Económica de Moncloa contratar directamente el suministro con la empresa sin convocar una licitación, lo que equivale a decir que ha sido el departamento que dirige la economista Eva Valle (quien relevó a su cuñado Álvaro Nadal, ahora ministro de Industria) el que ha buscado a Actiu para adquirir sus sillas, y no al revés.

La mismísima Moncloa, así, se convierte en el último cliente nacional de una empresa que facturó 73 millones de euros el año pasado, y que exporta a países como China, Indonesia o Arabia Saudí. En España, uno de sus mayores contratos con el sector público hasta la fecha ha sido el del suministro de sillas para el aeropuerto internacional de Palma de Mallorca, con 12.000 asientos. La firma, a punto de cumplir medio siglo de existencia, emplea a 300 personas en su parque tecnológico de Castalla, y mantiene otros 150 puestos de trabajo indirectos. 

El crecimiento exponencial de la firma alicantina, que basa su estrategia de imagen en el concepto 'Cool Working', le ha valido a Vicente Berbegal convertirse en uno de los últimos 'fichajes' alicantinos de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), que certificó su ingreso en la última asamblea general a la que acudió como invitado el ministro de Fomento. El alicantino, además, acaba de ser reconocido con el premio al Mejor Empresario Europeo del año.