ALICANTE. Las ayudas nominativas concedida por la Diputación de Alicante a los ayuntamientos de La Nucía y Mutxamel, presididos porlos diputados Bernabé Cano y Sebastián Cañadas, respectivamente, serán las próximas que será impugnadas por el grupo de Compromís en la institución provincial. Así lo han anunciado este jueves los diputados Gerard Fullana y José Manuel Penalva, después de que el juzgado contencioso-administrativo de Alicante número cuatro haya acordado la suspensión cautelar de la ayuda de 700.000 euros concedida al Ayuntamiento de Busot, liderado por el vicepresidente de la Diputación Alejandro Morant. La juez justifica la suspensión cautelar al considerar que si se autorizara la subvención de 700.000 euros sin estudiar las alegaciones de la formación valencianista, "en caso de ser estimada el recurso tiempo después, la ayuda estaría otorgada y las obras previsiblemente ejecutadas, siendo de difícil reintegro teniendo en cuenta la elevada cifra de la misma, 777.146 euros", recoge el auto del juzgado que ha decreto la suspensión cautelar. La juez insiste en que es el "criterio seguido por este juzgado en supuestos similares, sobre todo, ante el riesgo de que pueda producirse una situación que haga ineficaz el recurso".
El portavoz de Compromís, Gerard Fullana, sostiene que el fallo viene a recoger lo que su formación ya denunció en varias ocasiones y que en total asciende a casi 5 millones de euros en cuatro ayudas repartidas entre cuatro diputados provinciales del PP. La de Busot -ahora suspendida-, la de Mutxamel, para un mercado municipal por valor de un millón de euros; la de La Nucía, para una pista de atletismo, de 1,2 millones, y la de las rotondas de acceso de la N-332 a Calp, por valor de más de dos millones de euros", ha explicado. Las tres primeras son impugnables, la cuarta, la de Calp, no porque el proceso para impugnar ya se pasó, ha añadido Fullana. Compromís ha recordado que en el caso de las ayudas de las rotondas de Calp la formación renunció a presentar recurso, pese a que además de ser una ayuda directa concurría el caso de que el presidente de la Diputación de Alicante no se abstuvo sobre una cuestión que afectaba a familiares directos. Entonces, ha dicho Fullana, "César Sánchez se comprometió a realizar más obras en la red viaria para eliminar puntos negros en la N-332, algo que no ha cumplido".
Fullana ha insistido que este fallo deja fuera de juego el presupuesto de la Diputación de 2018, recientemente aprobado y que contemplaba esa ayuda. Por esta razón, Compromís ha solicitado una reunión con el presidente de la institución, César Sánchez, para exigirles "una rectificación de las ayudas nominativas, ya que supone un vicio de la política clientelar en pleno siglo XXI, además de un claro ejemplo de discriminación para el resto de municipios de la provincia, que deben concurrir a las convocatorias en igualdad de condiciones y aportando fondos del proyecto". La diferencia entre una ayuda nominativa y una convencional es que en la nominativa la diputación asume el 100% del coste del proyecto; en las convencionales, la institución asume hasta un 80% -dependiendo de los casos- y el 20% restante, es el propio consistorio quién lo aporta.
"Somos un partido de gobierno, estamos dispuestos a pactar y cambiar muchas cosas, pero no a permitir privilegios y viejos vicios de la política clientelar de otras épocas", ha dicho el portavoz de la coalición, quien ha insistido en la rectificación que debe dar el presidente o de lo contrario, exigirán responsabilidades tanto a él como al diputado de Contratación, Alejandro Morant, como el PP lo hizo con el conseller de Educación, Vicent Marzà y el decreto de plurilingüismo. A juicio de Compromís una ayuda a dedo o nominativa sólo está justificada por causas de urgencia o emergencia para hacer frente a una obra para reparar daños de un temporal o catástrofe.