Carlos Cruzado, presidente de GesthaALICANTE. La economía sumergida en la Comunitat Valenciana equivale al 27% del PIB regional, según los datos del sindicato de técnicos de Hacienda, Gestha, que celebra este jueves en Alicante su congreso nacional. El presidente de Gestha, Carlos Cruzado, ha señalado a preguntas de Alicante Plaza que este dato sitúa a la Comunitat como la cuarta autonomía en porcentaje de economía sumergida, y dos puntos por encima de la media. De esta forma, la Comunitat se sitúa tras Extremadura, Andalucía y Canarias como la cuarta región de toda España donde más extendida se encuentra esta práctica, según los datos de Gestha.
Por provincias, la economía sumergida tiene un mayor impacto en Alicante, donde supera el 28% del PIB provincial. En Castellón este dato sería del 26,5 y en Valencia del 25%, aproximadamente, según Cruzado. "La economía sumergida se ha utilizado incluso por la clase política, con la excusa de que a pesar de sus rasgos negativos es un 'colchón', que está ayudando a algunas familias que no tienen otros ingresos", ha lamentado el presidente de Gestha. "Mantener este nivel de economía sumergida es un error, porque supone una competencia desleal para las empresas y autónomos que sí pagan sus impuestos, y un riesgo para las personas que no van a tener pensión en el futuro, ni las prestaciones sociales por su afiliación a la Seguriad Social". Sin contar la "falta ingresos públicos" por estas actividades no declaradas.
Gestha celebra este jueves en Alicante su congreso nacional bajo el título de 'Corrupción política y fraude fiscal, dos delitos que se dan la mano'. Carlos Cruzado ha señalado que "según los datos del CIS, la corrupción es el segundo problema más importante tras el desempleo, no solo en Comunitat Valenciana, sino en toda España". Así, "más del 65% de los españoles piensan que la Administración no hace todo lo posible por atajar el fraude fiscal", según Cruzado. "En España estamos en el 'lado malo' de los países de nuestro entorno en este aspecto", ha lamentado. A su juicio, la corrupción política y el fraude fiscal están "muy unidos". "Estamos hartos de ver en los medios casos de corrupción que acaban en condenas por delitos fiscales".
En este sentido, ha rechazado que se trate de casos aislados, como sostienen lo dirigentes de los partidos afectados por casos de corrupción. "Desgraciadamente se ve que es algo más, no parece que sean las manzanas, sino el cesto lo que hay que cambiar", ha señalado. "Pedimos a políticos mayor ejemplo en la lucha contra corrupción, con el control de los gastos e ingresos públicos". Según Gestha, los mecanismos de control como el Tribunal de Cuentas o sus homólogos autonómicos "no han sabido atajar muchos de estos casos, y la Agencia Tributaria se ha revelado ineficiente para atajar este gran problema".
Por otra parte, el presidente de Gestha ha denunciado, en el marco de este congreso nacional, que hay altos cargos de Hacienda que participan en cursos destinados a instruir a los asesores de inversores extranjeros y grandes empresas "cómo eludir impuestos". Según Cruzado, "no hay más que buscar en internet los programas de estos cursos, referidos a la fiscalidad internacional y dirigidos a asesores de inversores extranjeros en España y grandes empresas" para comprobar que altos cargos del Ministerio participan como ponentes. "Se enseñan todo tipo de herramientas para la planificación fiscal que conduzcan a una fiscalidad eficiente, una muestra de los territorios con sistemas fiscales más interesantes..." y participan, según Cruzado, "altos funcionarios de la Dirección General de Tributos o la Delegación Central de Grandes Contribuyentes. Hay una vorágine de cursos que van dirigidos a algo contra lo que lucha la OCDE y la UE, la elusión a través agujeros legislaciones nacionales".
Cruzado ha denunciado la "falta de ética, desde nuestro punto de vista, que supone colaborar en estos cursos", a lo que hay que sumar "posibles incompatibilidades" de los altos cargos que toman parte, por lo que han pedido "un control más exhaustivo" con el que se podrían llegar a detectar infracciones. Y si no existen, ha considerado que "habría que modificar la norma". El presidente de Gestha ha denunciado además que "estos cursos sirven para engrasar la puerta giratoria, porque participan exinspectores que ahora son socios de grandes firmas de asesoría. A partir de los 20 o 25 años de ejercicio, muchos inspectores pasan a estas empresas".
