Empleados de Fundesem se organizan para asumir la escuela si se liquida la fundación

ALICANTE. Un grupo de empleados de la escuela de negocios alicantina Fundesem Business School está organizándose ante el temor de que la fundación que gestiona el centro termine en liquidación, por la dificultad para hacer frente a las deudas acumuladas. Según ha podido saber Alicante Plaza, estos empleados incluso plantean la posibilidad de asumir la gestión del centro, creado hace más de cincuenta años y considerado parte del 'top ten' de escuelas de negocios de España, si finalmente la fundación se ve abocada a la liquidación.

Tal como desveló ayer este diario, Fundesem se encuentra a las puertas de un concurso de acreedores, con una deuda acumulada de 1,1 millones de euros con el Ivace por el alquiler de la sede de la escuela, y varios meses de atrasos en los pagos a los profesores y empleados de la fundación. La actual dirección del patronato, de hecho, ha trasladado a algunos profesores que barajaba la solicitud del concurso de acreedores para salvaguardarse de una posible liquidación. En este sentido, hay que tener en cuenta que el Ivace inició el año pasado acciones judiciales para recuperar esa deuda, y que una sentencia favorable al instituto podría resultar mortal para la fundación.

Con la opción del citado concurso de acreedores cobrando cada vez más fuerza, este grupo de empleados decidió organizarse hace unas semanas, e incluso han buscado ya asesoramiento legal. En principio, para defender el cobro de sus emolumentos, pero no descartan ofrecerse a gestionar el centro si la fundación finalmente tuviera que ir a liquidación por sus deudas. La idea sería seguir prestando los servicios de la escuela de negocios, con una larga trayectoria y reconocimiento a nivel nacional.

Con todo, el actual Patronato de Fundesem espera cerrar un nuevo acuerdo con el Ivace que permita refinanciar la deuda y evitar así tener que ir a concurso de acreedores. Como desveló ayer Alicante Plaza, y a pesar de que el Ivace emprendió las citadas acciones legales en febrero de 2017, a principios de este mes la Generalitat comunicó a la escuela de negocios su disposición a firmar un nuevo contrato de alquiler, con un importe más ajustado, y refinanciando los pagos pendientes a lo largo de su cumplimiento. No obstante, este contrato exige (son las condiciones a las que se comprometió Fundesem, de donde partió la propuesta) la liquidación de dos anualidades de golpe a la firma del nuevo contrato, y un aval por el 20% de la deuda restante.

Según indicó ayer el vicepresidente ejecutivo de Fundesem, Manuel Rosique, al Diario Información, el Patronato de la fundación se reunirá el próximo lunes para abordar la propuesta de acuerdo con el Ivace, que a su juicio evitará tener que acudir al concurso de acreedores. A pesar de que esta posibilidad corría por los pasillos de la escuela de negocios entre la preocupación de los empleados, Rosique aseguró ayer al citado diario que "no se han planteado" pedir el concurso. Desde el departamento que dirige Júlia Company, por su parte, siguen esperando una respuesta de la escuela de negocios para sellar el acuerdo antes de que ésta se vea abocada al concurso.

Dimisiones

Mientras, tal como desveló también este diario, son varios los directivos de la escuela de negocios que la han abandonado en las últimas semanas. El hasta hace poco decano, José Santacruz, se despidió por email de los empleados y profesores a finales de diciembre, tras presentar su dimisión, en un correo en el que señalaba expresamente que desde su cargo no había tenido responsabilidades en la gestión económica y de recursos humanos de Fundesem. En paralelo, presentó su dimisión también el coordinador de los docentes, Jorge Álvarez. También se especula con la marcha de Enrico Ahrens, considerado una persona de confianza de Rosique.