ALICANTE. El equipo de Gobierno del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Alicante amplía su nómina de asesores municipales, sobre la que ya había trascendido la contratación del exconcejal del PP, Antonio Ardid, y del abogado urbanista Pablo Sánchez Chillón, entre otros, con la incorporación de Miguel Ángel Redondo: una persona supuestamente ligada a Cruz Roja al menos entre 2015 y 2016, según fuentes consultadas (aunque la propia organización dice no tener constancia de ello), que colaboró con la Concejalía de Acción social junto a la actual edil no adscrita, Nerea Belmonte, expulsada de Guanyar y de Podemos después de que trascendiese que había concedido contratos menores de manera directa a personas de su entorno (sin que se abriese ninguna investigación judicial ni municipal al respecto). Redondo ha sido contratado con dedicación completa, lo que implica que percibe el 100% de la retribución prevista para los cargos de confianza al inicio de mandato, en 2015.
El PP no había dado cuenta de la contratación de Redondo hasta ahora, pese a que a sí había venido dando cuenta de otras incorporaciones. Sobre la de Redondo, se venía especulando desde hace cerca de tres semanas. Fuentes municipales habían llegado a poner de manifiesto que se trataba de una persona que trató de aproximarse a Ciudadanos antes de las municipales de 2015; que es o ha llegado a ser militante del PSOE (aunque fuentes del partido aseguran que no llegó a afiliarse) y hasta que se trataba de una persona vinculada a la exconcejal del PP, Elsa Martínez, a su vez, amiga personal de Belmonte. No obstante, según ha sostenido la propia Martínez a preguntas de este diario, Redondo es "un conocido" suyo como tantos otros, sin más. Al mismo tiempo, Martínez se ha limitado a señalar que Redondo es igualmente un conocido de Belmonte por su trabajo en colaboración con el ayuntamiento cuando ella era responsable municipal de Acción Social, hace casi tres años.
En esta línea, ha insistido en que "se equivoca" quien pretenda dar a entender que existe una relación entre el contrato de Redondo y la posición de Belmonte en el pleno de elección de nuevo alcalde tras la dimisión del socialista Gabriel Echávarri (emitió un voto en blanco que, a la postre facilitó la toma de posesión del popular Luis Barcala como candidato de la lista más votada). Según Martínez, Belmonte se limitó a ejercer libremente su capacidad de voto, como permite su función política. Además, Martínez ha recalcado que Belmonte no votó al PP y que, como la edil manifestó en un pleno posterior, había recibido una oferta de un sueldo de 3.500 euros y la posibilidad de formar parte de las próximas listas municipales a cambio de su voto por parte de representantes de otro partido que no era el PP. Como viene informando este diario, la Fiscalía está instruyendo diligencias en relación a ese supuesto ofrecimiento. Este diario ha tratado de conocer la versión de la propia Belmonte sin obtener respuesta.
Alicante Plaza trató de contrastar este martes con portavoces oficiales de Alcaldía la formalización del contrato de Redondo como asesor sin que se facilitase ninguna información, ni aclaración, ni confirmación al respecto. No obstante, su contratación ha trascendido este miércoles a través de los medios de comunicación (en alusión a circunstancias personales como una declaración en sede judicial en la que Redondo habría admitido supuestos cobros no declarados por parte de Cruz Roja y Ciudadanos) e incluso se ha apuntado la posibilidad de que este mismo miércoles se produjese su cese (algo que finalmente ha sucedido). Lo cierto es que el decreto con los nombramientos de los cargos de confianza del PP ha sido publicado este mismo miércoles en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), que depende de la Diputación Provincial.
