ALICANTE. Víctor Domínguez deja el acta de concejal. El edil de Guanyar ha anunciado su dimisión en la asamblea de la plataforma electoral, este jueves, tras la polémica suscitada por el pago directo por la tarea de control de los puntos de compostaje instalados en la ciudad a un colaborador de la Concejalía de Medio Ambiente que había militado en EU. En total, dicho colaborador, Javier Sirvent, habría percibido algo más de 8.000 euros entre junio de 2017 y febrero de este año, tras la aprobación de las correspondientes facturas mensuales por el desarrollo de esa función. En la actualidad, ese servicio se presta con trabajadores municipales, contratados a través del programa de fomento del empleo juvenil de la Generalitat, sin costes adicionales.
Domínguez ha hecho pública su decisión ante la militancia en su intervención inicial, sin esperar a que se produjese ninguna propuesta de resolución al respecto. Ese era el segundo punto previsto en el orden del día de la convocatoria, planteada a petición propia, para tener la oportunidad de explicar los pormenores de ese proceso en primera persona. Sus explicaciones se han ceñido básicamente a lo que ya manifestó a través de un comunicado, el pasado lunes, cuando negó que, a su juicio, se hubiese cometido ninguna irregularidad, según han precisado fuentes de Guanyar presentes en la asamblea.
Según las mismas fuentes, Domínguez ha defendido que todos los pagos fueron supervisados por los técnicos municipales y que, si se confió la tarea en Sirvent, fue porque ya venía colaborando con la concejalía de manera voluntaria en programas de repoblación vegetal de manera satisfactoria y se había considerado que reunía el perfil adecuado. Además, siempre según las mismas fuentes, ha señalado que no se sentía respaldado por parte de la organización y del grupo municipal, en alusión -aunque sin mencionarlo- al sector alineado en torno al excoordinador local de EU, José Luis Romero, y al portavoz municipal de Guanyar, Miguel Ángel Pavón.
Con todo, Domínguez básicamente ha justificado su decisión en un gesto por dignificar la política y disipar toda duda sobre un hipotético comportamiento no ético. Ha añadido que consideraba que su situación no era comparable con la de Nerea Belmonte ni por los hechos ni por las consecuencias, ya que él sí había dicho que se sometía a la decisión de la asamblea y además había anunciado su dimisión. Eso sí, ha sostenido que entendía la situación, que admitía que se habían creado sospechas y que decidía dar el paso y renunciar al cargo para no perjudicar a la organización.
Después, ha solicitado que los asistentes a la asamblea (54 personas) que respondiesen por votación a una pregunta: si se consideraba que su conducta no era reprobable y que se aceptaba su decisión de dimitir. Tras el recuento de los votos (secretos), ha habido 34 votos afirmativos, 7 negativos y 3 abstenciones.
Tras el anuncio de renuncia de Domínguez, ha habido intervenciones por parte de varios miembros de Guanyar. Entre ellas, la del portavoz municipal, Miguel Ángel Pavón. Según fuentes presentes en la asamblea, Pavón habría solicitado la renuncia de Domínguez. El edil Daniel Simón, por su parte, también ha tomado la palabra para destacar el sacrificio personal de Domínguez. Otros asistentes han expresado su malestar por el hecho de que se haya difundido información sobre el censo de afiliados de EU.
Con la dimisión de Domínguez, que se registrará en los próximos días (en todo caso, antes del próximo pleno municipal, ha dicho), su acta de concejal debería pasar a manos del número 7 de la candidatura con la que Guanyar concurrió a las municipales de 2015. Se trata de José Luis Berenguer.