VALENCIA. Los miembros del Consejo de Administración de Caixa Ontinyent no están dispuestos a que se limite la duración de su mandato, como pretenden Podemos y Compromís con una enmienda a la llamada Ley de Acompañamiento que se está debatiendo ahora en Les Corts. Una propuesta que no apoya el PSPV y que ha generado malestar en el presidente de la Diputación de Valencia y alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez.
La enmienda, como desveló Alicante Plaza este miércoles, pretende extender la limitación de mandato a 12 años que tienen los consejeros independientes a los consejeros dominicales, que son aquellos que también son miembros de la Asamblea General. En el Consejo que se v a renovar habrá cinco consejeros independientes y cuatro dominicales.
La primera consecuencia del cambio de norma sería que no podrían continuar en el Consejo ni el presidente, Antonio Carbonell; ni el vicepresidente, Antonio Gil Montes, ni el vocal José Pla Barber.
Enterada gracias a la información de Alicante Plaza de las intenciones de Podemos y Compromís –el PSPV no respalda la iniciativa–, la Comisión Ejecutiva de Caixa Ontinyent aprobó este jueves un documento con "observaciones" encaminadas a frenarla.
Así, sostiene la entidad que "la reciente reforma legal del sistema financiero y de las cajas de ahorros actualiza y pone en mayor valor la democratización, la transparencia y el relevo periódico en los órganos de gobierno" y afirma que "estas disposiciones ya han sido recogidas en los estatutos y reglamentos de la entidad (con mandatos de seis años, renovaciones por mitades cada tres años, transparencia en los procesos electorales, y comunicación pública de las actuaciones)".
Afirma la Comisión Ejecutiva que limitar el mandato de los consejeros generales resulta "antidemocrático, ya que supone prescindir de la voluntad de los propietarios de la entidad, en este caso de la propia sociedad.
En otro de los puntos del comunicado de siete puntos, los consejeros manifiestan que la limitación que se pretende instaurar "resulta incongruente e incluso contradictoria con la nueva legislación sobre requisitos y evaluación de la idoneidad, toda vez que uno de los valores que se destacan es, precisamente, la experiencia en el cargo, incluso con un proyecto de guía del Banco Central Europeo que prevé una experiencia mínima de 10 años para acceder al cargo de presidente".
Aseguran también que con esta medida Caixa Ontinyent "supondría una excepción dentro de todo el sistema financiero español", ya que en el resto el límite de 12 años es sólo para los consejeros independientes.
Añaden algunas consideraciones más, como que es aconsejable tener el mayor número posible de candidatos, por lo que no se debe vetar a ninguno que cumpla los requisitos. También, recuerdan que los órganos de gobierno de las cajas "tienen carácter gratuito y sólo se retribuye mediante dietas limitadas por asistencia a las sesiones". Las dietas del presidente, las más altas, ascienden a 11.000 euros brutos al a año.
La Comisión Ejecutiva está formada por Carbonell y Gil Montes –presidente y vicepresidente de la caja– y los vocales del Consejo de Administración José Rafael Revert, Juan Luis Gandía y José Pla Barber.
El director del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), Manuel Illueca, lanzó la noche del jueves, poco después de hacer público Caixa Ontinyent el comunicado, dos mensajes en Twitter en uno de los cuales mostraba su reconocimiento al Consejo de Administración: "La gestión desarrollada por @caixa_ontinyent antes, durante y después de la crisis es un ejemplo para todos nosotros".
Curiosamente, el tuit fue retuiteado por el portavoz de Compromís en Les Cots, Fran Ferri, además del portavoz socialista, Manuel Mata, y el diputado de Ciudadanos David de Miguel.
Poco después, Illueca dejaba claro en otro tuit que la iniciativa de esta enmienda no corresponde al Consell, que tampoco se ha pronunciado sobre ella.
La enmienda tiene pocos visos de prosperar, dadas las posturas de los partidos. Con la oposición del PSPV y Ciudadanos, que parecen claras, sólo una hipotética postura a favor del PP permitiría que saliera adelante.
No obstante, según ha podido saber Alicante Plaza, "el asunto se ve con preocupación por parte de Jorge Rodríguez, ya que afecta a una entidad que es muy importante para la comarca y para la ciudad de la que él es alcalde.