MADRID (EP). Los accionistas de Bankia y Banco Mare Nostrum (BMN) han dado este jueves el visto bueno a su fusión en sendas juntas extraordinarias celebradas de forma simultánea en Valencia y Madrid, respectivamente. La asamblea de los accionistas de BMN ha sido la última que celebrará la entidad, dado que el próximo ejercicio ya formará parte del banco que preside José Ignacio Goirigolzarri. En ella, sus accionistas han respaldado el proyecto de fusión con Bankia con el 95% de los votos, aunque la integración no ha sido bien recibida por todos los representantes del accionariado.
Concretamente, Fundación Pinnae, quinto accionista de BMN con el 4,34% de su capital, ha dado a conocer durante la junta su voto en contra respecto al único punto del día de la misma, la aprobación de la fusión. Además, ha anunciado que emprenderá acciones legales contra la entidad al considerar que la operación "perjudica gravemente" a los accionistas minoritarios de la entidad.
Por su parte, los accionistas de Bankia han tenido que dar luz verde a dos propuestas del consejo de administración: la aprobación de la fusión y el nombramiento de Carlos Egea, presidente de BMN, como nuevo consejero externo de la entidad resultante. Para este último punto ha sido necesario fijar el número de miembros del consejo de administración en 12 y su designación se hará efectiva una vez se materialice la integración y sea inscrita en el Registro Mercantil de Valencia.
El proyecto de integración ha sido defendido por Egea y Goirigolzarri, presidentes de ambas entidades, durante sus respectivas intervenciones en las juntas. Egea, que ha reconocido sentir "nostalgia" y "satisfacción" al mismo tiempo, ha insistido en que esta operación representa "la alternativa más clara y con más valor para los accionistas". En su opinión, se trata de una "operación de valor con claro sentido industrial" que ha recibido la "buena acogida" por parte del mercado.
Por su parte, Goirigolzarri ha apuntado que la transacción "abre claras oportunidades" porque "proporciona un incremento significativo de base de clientela y presencia en el mercado", algo que "debe traducirse en un mayor flujo de ingresos tanto en el capítulo de margen de intereses como en el de comisiones".
Una vez obtenido el visto bueno de los accionistas de las dos entidades, en las que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ostenta sendas participaciones superiores al 65%, el siguiente paso es la solicitud de las autorizaciones correspondientes a los reguladores y supervisores.
Según comunió el propio Goirigolzarri en la víspera de la celebración de la junta, está previsto que estas autorizaciones se obtengan en diciembre, de forma que la integración informática podría materializarse en el segundo trimestre de 2018.