VALÈNCIA. El candidato socialista y presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, se comprometió este miércoles en un mitin celebrado en el complejo deportivo La Petxina de Valencia a reformar "la financiación autonómica en estos cuatro años" . Un anuncio, el del máximo responsable socialista, que dista de los plazos que 'vendió' a Compromís en la reunión mantenida en agosto dirigida a tener un calendario para la reforma en ocho meses y a acometerla posteriormente. Con sus palabras, Sánchez evidenció que con la nueva convocatoria electoral, el debate sobre la financiación vuelve a la casilla de salida en la que se encuentra desde hace varios años.
Sí se comprometió, por otro lado, a actualizar las entregas a cuenta antes de las próximas elecciones generales del 10 de noviembre. De estos ingresos pendientes a la Comunitat Valenciana le corresponden en torno a 450 millones de euros.
El jefe del Ejecutivo en funciones, no obstante, no hizo mención alguna al extraFLA de 250 millones que hace unas semanas apalabraron que llegaría antes del 9 d'Octubre el president de la Generalitat, Ximo Puig, y la ministra María Jesús Montero y por el que el Gobierno valenciano ha remitido ya al Ministerio de Hacienda su Plan Económico Financiero (PEF).
En el acto, que congregó a unas 500 personas en el interior del recinto y otras 300 que quedaron fuera, Sánchez alabó el papel de la militancia que debe trabajar en la campaña y envió un saludo a los centenares de personas que se quedó fuera. "El recinto se nos ha quedado pequeño", subrayó, dado que previamente ha habido alguna protesta de simpatizantes que no habían podido entrar en el mitin celebrado en el hall de La Petxina.
El jefe del Ejecutivo en funciones criticó en su discurso que se les tachara de "equidistantes" en el independentismo. "Nosotros siempre hemos reivindicado ley y diálogo", apostilló. En esta línea, reclamó "unidad" y exigió a PP y a Ciudadanos "lo mismo que hizo el PSOE": "Apoyar al Gobierno". Así, insistió en la idea de que las dos posibilidades son "Gobierno socialista o bloqueo".
"España no se acaba donde termina la bandera que nos representa a todos. Esa es la diferencia entre la izquierda y la derecha", matizó, para más tarde insistir en que derogará la Lomce y la reforma laboral. Por otra parte, y en relación a las movilizaciones ecologistas de las últimas semanas -el pasado viernes se celebró el día mundial del clima y millones de personas se movilizaron en más de 150 países para exigir medidas reales contra el cambio climático-, Sánchez también aseguró que su gobierno se comprometerá "hasta las trancas" con la transición ecológica.
En el acto también intervino el ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE, José Luís Ábalos, quien celebró que Sánchez no haya cedido a "la presión" de los que creen tener "la llave o la llavecita", en una clara referencia a Unidas Podemos.
Ábalos, además, criticó al PP, al que acusó de "hacerse el muerto". "Ni una mala palabra ni una buena acción", afirmó, para ironizar sobre Pablo Casado: "Lo único que ha hecho ha sido dejarse barba a ver si así le respetan más", bromeó.
Durante su intervención, se desalojó a activistas en defensa de l'Horta, que continuaron sus protestas fuera del recinto. Unas quejas motivadas por la ampliación de la V-21 que la semana pasada se saldó con la demolición del Forn de la Barraca.
En cuanto al presidente de la Generalitat y líder del PSPV, Ximo Puig, insistió en que su partido no quería otras elecciones. "Queríamos que se respetara el resultado electoral", exclamó.
El líder del PSPV añadió además que, durante esta etapa de negociaciones, siempre defendió que la vía valenciana era posible. "Nosotros gobernamos la primera legislatura con el apoyo parlamentario de Podemos", afirmó en referencia al empeño de la formación morada de entrar en el Gobierno. Puig criticó también la postura de PP, Cs y los "malvados independentistas" que impidieron "los mejores presupuestos para la Comunitat Valenciana".
El presidente de la Generalitat, que al inicio de su discurso trasladó su solidaridad y apoyo a la Vega Baja tras la DANA que azotó el sur de la Comunitat Valenciana, cerró su intervención con una llamada a la lucha contra la violencia machista y agradeciendo el impulso a la exhumación de Franco. "Una parte de nuestra alma quedará más tranquila", sentenció.
Previamente, la secretaria general local y vicealcaldesa de València, Sandra Gómez, reivindicó "la vía valenciana" y afirmó que quien quiera responsabilizar al PSOE de lo ocurrido que mire "el ejemplo de Valencia". "Tuvimos clarísimo que había que conformar un gobierno progresista", aseguró.
"El 28 de abril significó un sí a un gobierno que garantiza la libertad, el feminismo, el ecologismo y el derecho", recalcó la vicealcaldesa de València, quien concluyó su discurso resaltando que solo existen dos opciones: "O votar a Pedro Sánchez o el bloqueo. No hay nada más".