entrevista al director general de MAS Consulting Group

Daniel Ureña: "En España se ha abusado mucho del 'lobby' de trabuco"

17/02/2017 - 

VALÈNCIA. España y sus comunidades autónomas están poniendo en marcha legislaciones para regular y hacer más transparente la actividad de los lobbies. En la Comunitat, el PSPV ya propuso en el mes de mayo una Proposición no de ley en la que sugería un registro de esto grupos que interactuaran con la administración. Este jueves, la Confederación de Empresarios Valencianos acogía la IIIº Jornada Empresa y Comunicación, "El lobby, esa asignatura pendiente", organizada por la Fundación Coso y patrocinada por Alcanzia.

Daniel Ureña, socio & director general de la firma de asuntos públicos y relaciones gubernamentales MAS Consulting Group, fue uno de sus ponentes. La compañía trabaja trazando estrategias para lobbistas como patronales, multinacionales, think tanks y ONGs de diferente sectores.

- ¿Sabemos hacer lobby en España?

- Estamos empezando a aprender. En España, durante muchos años, el lobby ha sido una profesión muy desconocida que todavía sigue teniendo muchos prejuicios, pero poco a poco se va venciendo. Este miércoles se puso en marcha el registro de lobbies en el Parlamento de Cataluña y es un buen ejemplo de que hay cierta normalización y cierta profesionalización. Estamos en un momento de aprendizaje. 

- Cuando habla de que ahora se está en momento de aprendizaje . ¿A qué se refiere?

- A que en España se ha abusado mucho de lo que llamamos el lobby de trabuco. Es que conozco a la novia de la prima del cuñado o al asistente de no se quién y te voy a llamar y esto te lo arreglo yo. Pero esto no va de eso. El lobby va de planificación, de estrategia, de metodología, de construir mensajes, de construir consensos, de construir cómo piensa uno. Aún se piensa que el lobby es una agenda de contactos y ya está. Los contactos son importantes, pero no lo son tantos. 

- ¿Se está regulando bien en España?

- Yo veo un riesgo el que pasemos de no tener regulación a tener 300.000 millones de regulaciones. Una en cada comunidad o en las grandes ciudades. En Madrid se está trabajando en la ley de transparencia y ahora temo que haya un riesgo de exceso de regulación, creo que debemos encontrar un equilibrio.

- ¿Debería hacerse una única regulación estatal?

- Yo soy partidario de que no solo sea así para el lobby. En España hay un exceso de regulación y sería bueno que al menos hubiera unas pautas generales o al menos unos requisitos. 

- Pensando en posibles regulaciones. ¿Qué trabas de más se les podría poner?

- Al final, el tema de la regulación, a mi la palabra me da un poco de respeto. Me parece razonable que haya un registro. A nivel europeo hay un registro de transparencia en el que hay más de 660 entidades españolas entre ONG, consultoras, despachos, patronales y asociaciones. De momento es voluntario, y al ser voluntario hay gente que no está a pesar de ser lobby. Pero las reglas del juego deben ser las mismas para todos. Hay algunos despachos que hacen lobby y no están registrados y por debajo están haciendo esa tarea. Yo soy partidario de que haya pocas leyes, pero que se cumplan y sean claras para todos. 

- Cuando pensamos en un lobby pensamos en algo oscuro, como una mano negra que mueve las decisiones. 

- El término lobby tiene una connotación peyorativa para mucha gente. En las instituciones europeas se pide que no se utilice el término lobby. Hay documentos de las secciones europeas que recomiendan el término “representación de intereses”. Lo que dicen es que la representación de intereses es una parte legítima. A nivel nacional, en el Congreso tenemos un 62% de diputados nuevos que se han incorporado en esta legislatura y no saben de todo. Saben de una cosa mucho, de otra menos, y al final los lobbies te permiten conocer con detalle un tema. Si se utiliza bien puede ser algo muy útil.

- ¿Cuál es el ejemplo perfecto de regulación lobbies?

- El registro de Bruselas es un buen ejemplo. No sé si hay un país que me enamore desde el punto de vista de legislación. Si tuviera que pensar en una legislación perfecta, no lo sé. Pero creo que es importante que haya un registro. También las agendas públicas me parece bien, pero no volviéndonos locos. Había un partido político que decía que las negociaciones que se iban a hacer para formar gobierno las iban a retransmitir por streaming. Pero la transparencia también tiene que tener un poco de sentido común. 

- ¿Por qué tiene tan mala reputación la palabra lobby?

- Por desconocimiento. Porque se vincula con temas que no tienen que ver con el lobby, ademas de que figuras como el pequeño Nicolás y Urdangarín tampoco ayudan a la imagen del lobby. Al final hay que entender que la principal herramienta es la información. Yo te hago llegar información de cómo una decisión tuya puede afectar a un sector. Yo creo que por desconocimiento, son percibidos como organizaciones oscuras pero es que no solo las tabaqueras, las energéticas o las telecos son lobbies, también las ONG o los sindicatos. La pregunta sería, ¿quién no hace lobby en esta sociedad?

- ¿Abundan más en alguna materia concreta?

- En temas que están muy regulados se está haciendo mucha labor de lobby. En el tema de energía, telecomunicaciones, banca, tecnología, por ejemplo, son sectores que dedican muchos esfuerzos. Desde el punto de vista de la tecnología, también va mucho más rápido que la legislación. Y hay realidades nuevas que la ley no contempla. Lo estamos viendo en Cataluña con AirBnB, Blablacar porque la gente, la sociedad y la economía van más rápido que la normativa. 

- ¿El lobby debe tener un código ético?

- Claro que sí. En el registro de transparencia de la Unión Europea tienes que firmar un código ético con una serie de cuestiones, como que la información va a ser veraz o que te vas a identificar delante de la persona con la que vas a hablar. Al final, lo que estás haciendo es construir una relación basada en la confianza con el regulador. Que sepa que le vas a exponer un problema, que la información que le vas a proveer es verídica, y si mientes o cuentas algo que no es verdad esa relación se va a romper y por lo tanto vas a quemar un contacto y una interlocución. 

- Muchas veces se relacionan los lobbies con las puertas giratorias. 

- El problema es que las puertas giratorias se relaciona con el paso de la política al mundo de la empresa. Yo lo veo bien siempre que se respete que si has estado siete años legislando con energía, y te vas al día siguiente a una empresa energética, haya unas leyes de incompatibilidades de dos años, algo que me parece razonable. Lo que no me parece es que un político que pase por el Gobierno no pueda trabajar en ningún sitio. 

Por eso yo reivindico las puertas giratorias, pero de verdad. Que gente del mundo de la empresa se pueda incorporar a la política. Eso puede ver con que la política muchas veces se percibe como una profesión y no como una ocupación durante una etapa de la vida. Eso creo que es una peculiaridad de nuestra democracia. 

- ¿Deben ser públicas las reuniones de los lobbies con las administraciones?

- Nosotros nos dimos de alta este miércoles en Cataluña. Los lobbistas tienen mucho interés en que todo sea lo más transparente posible. Es la manera más fácil de combatir la oscuridad que la gente percibe respecto a esto. 

- ¿Deberían estar más profesionalizados los lobbies?

- Nosotros ofrecemos este servicio. A la reunión puede ir el portavoz de una patronal, pero tú lo que haces es el servicio de preparación de una reunión. En vez de soltarle un rollo de 45 minutos lo abrevias. A mí hay una frase de Kennedy que me gusta mucho: “lo que los lobbistas tardan diez minutos en hacerme entender un problema, mis colaboradores tardan tres días”. Un buen lobbista tiene que tener la capacidad de condensar, explicar y sintetizar. Al final un diputado se reúne con mucha gente y si le aburres, si eres un tostón o demasiado técnico, todo va a ir en tu contra. 

Noticias relacionadas

next
x